Fueron 86 casos los registrados a lo largo del año 2018 de violencia de género. Lamentablemente las nuevas leyes con respecto a este tipo de crímenes no favorecen a las víctimas y en ocasiones deciden no denunciar los hechos pensando que no existirá el castigo que el agresor merece.
Según esclarece la ley, el atacante deber haber tenido alguna relación cercana con la víctima para que pueda aplicarse la ley como un caso penal.
Delegaciones de las organizaciones Surkuna y del Taller de Comunicación Mujer realizaron un sondeo en las denuncias de femicidio en el país y la gran mayoría esta como una figura de homicidio en donde especifica que el agresor no tuvo la intención de realizar el crimen.
Se espera que en el año entrante las medidas y leyes precarias ante esta situación mejor ya que ni siquiera se considera útil una boleta de auxilio para proteger a la mujer.
Fuente: El Comercio