Un grupo musical lleno de magia y alegría es el “Grupo Musical Sin barreras” que es conformado por varios jóvenes y niños con capacidades especiales. Una de ellos Julia una muchacha de 20 años que ama la danza, ha participado en varios eventos no solo en su ciudad natal, Manta, sino también a nivel internacional. Grecia y España han sido algunos de los lugares que ella junto a su padre han visitado. Julio, padre de Julia, disfruta al máximo el son de su hija y se llena de ternura y orgullo cada vez que la mira bailar; siempre le acompaña y la apoya incondicionalmente.
Otro caso es el de bella y su hijo Miguel, un joven de 30 años que está aprendiendo a tocar el piano y que también sabe entonar otros instrumentos. Bella manifiesta que su hijo es un regalo de Dios y que tiene un don muy especial que es la música.
Atenaida Macías es la directora del Centro de Discapacidades donde se educan estas personas e indica que la música es un refugio para los seres con discapacidad intelectual y que ayuda a mejorar su calidad de vida. Cabe decir que esta discapacidad es la más común en Manabí.