Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), se refirió con respecto a una acción de la Milicia venezolana manifestando que todas las opciones están sobre la mesa. Su declaración fue considerada como un grave error.
Según el diario The New York Times, el gobierno Norteamericano tuvo un acercamiento militar para provocar un golpe de Estado en Caracas. Este intento de revuelta se tomó como una violación a la soberanía Venezolana.
Casi todo el grupo de lima se alejó de Almagro tras sus declaraciones, causando una reacción en cadena a nivel del Continente. EL Estado Ecuatoriano también se pronunció al respecto, expresó que solamente Venezuela puede combatir su crisis económica y política; Quito opto por una postura diplomática histórica.
Nicolás maduro no ha tenido una actitud positiva para solventar los problemas, más aun ahora que Venezuela se ha convertido en un problema regional; gracias a la migración de sus ciudadanos. Muchos líderes sudamericanos dudan de las credenciales diplomáticas de Maduro; sin embargo no justifican acciones militares en Sudamérica.
Latinoamérica de caracteriza por ser una zona de paz, por tal motivo no soluciona los conflictos por medio de guerras; al contrario siempre será el dialogo a forma más viable de hacerlo. Una revuelta militar obligaría a Nicolás Maduro a defenderse ante el ataque. Además la migración se agravaría y Venezuela quedaría atrapada en una guerra civil.